ropa de proteccion

¿Sabes qué tener en cuenta a la hora de adquirir ropa de protección? La evaluación de riesgos en el trabajo es una acción obligada por la Ley 31/1995, y se hace cuando el trabajador está expuesto a un riesgo potencial y su cuerpo puede resultar dañado. Ha de protegerse cuando este riesgo no se puede eliminar por medio de controles técnicos o de organización, por eso el empresario se tiene que asegurar de que sus trabajadores lleven la protección adecuada.

 

Daños que se pueden sufrir en el trabajo

Entre ellos están los que se producen como consecuencia de la absorción por la piel de sustancias peligrosas, las quemaduras, abrasiones, pinchazos, cortes o agentes biológicos, y se pueden evitar gracias a diferentes tipos de ropa de protección. Es muy importante que el trabajador use una prenda que haya sido diseñada para su labor. Te damos algunos ejemplos dentro de determinadas categorías:

  • Categoría I: Protege contra fenómenos atmosféricos que no sean excepcionales o extremos, contra temperatura inferior a los 50ºC y a soluciones diluidas de detergentes.
  • Categoría II: Es ropa mecánica que protege contra el calor y el fuego y se destina a trabajadores industriales, protección frente a motosierras, frío, soldadores y ropa de señalización de alta visibilidad.
  • Categoría III: Ofrece una protección química, frente al frío para temperaturas inferiores a –50ºC, y la ropa de bomberos.

 

El folleto informativo, un complemento básico

Toda la información necesaria para su uso tiene que acompañar a cada prenda que se venda, cumpliendo con la norma UNE EN 340, y tiene que estar disponible, por parte del fabricante o representante legal cuando se le pida. Además, debe presentarse de forma clara y que sea fácil de comprender y tiene que estar traducida a lengua oficial del país de venta. Estos son los datos básicos que deben constar en el folleto:

  • Nombre y dirección del fabricante o representante legal. Adicionalmente puede aparecer una dirección de email o una página web.
  • Designación o nombre comercial para identificar el producto en el catálogo.
  • Talla. Se trata de un sistema estándar que consiste en dos dimensiones de control que permiten definir el cuerpo dentro de unos intervalos, pero el fabricante puede dar información de dimensiones adicionales si lo desea.
  • Datos del organismo de control que ha certificado la prenda, y si es ropa de categoría III también los del control de la producción, que puede ser diferente.
  • Referencia de la norma UNEEN 340 y año de publicación.
  • Pictogramas y su explicación.
  • Números de niveles de prestación o información indicada en la norma específica que se ha de aplicar.
  • Resumen de los ensayos utilizados y los niveles de prestación, preferiblemente en forma de tabla.
  • Constituyentes principales de las capas del tejido.
  • Descripción de los materiales y cómo se disponen.
  • Instrucciones de uso, que deben incluir:
    • Ensayos que se tienen que hacer antes del uso.
    • Cómo ponérselo y quitárselo.
    • Uso apropiado para minimizar el riesgo de daño.
    • Limitaciones de uso, como intervalos de temperatura.
    • Instrucciones de almacenamiento y mantenimiento.
    • Instrucciones de limpieza o descontaminación, con símbolos totalmente explicados.

 

El marcado de las prendas de seguridad

Cada prenda de este tipo tiene que ir marcada con información asociada al nivel de protección, y suele ir sobre la propia ropa o en una etiqueta cosida o adherida. Por supuesto, tiene que poder leerse perfectamente y tiene que ser duradera.

Puedes echar un vistazo a esta guía orientativa del Ministerio de Trabajo para verlo de manera más visual, sobre todo los símbolos y completar la información, así adquirirás la ropa de protección necesaria para tu lugar de trabajo.