pulidora

Hoy queremos hablar de la pulidora, una herramienta de trabajo que se usa para pulir diferentes materiales y que funciona cuando un material de tipo abrasivo realiza un movimiento rotatorio. ¿Quieres saber qué tienes que tener en cuenta a la hora de adquirir la mejor pulidora? Te damos algunas claves.

 

Tipos de pulidora que te puedes encontrar

Si echas un vistazo a la oferta de pulidoras eléctricas que tienes, puedes encontrarte diferentes tipologías:

  • Pulidora rotatoria, también llamada circular.
  • Pulidora orbital o de doble acción.

Te hablamos un poco más de ellas:

Las circulares son las más comunes y tradicionales, pero manejarlas requiere de experiencia y habilidad, por eso se empezaron a comercializar pulidoras de doble acción, que son más sencillas y tienen un acabado perfecto. De hecho, no importa que seas principiante, conseguirás muy buenos resultados. De todas formas, todavía no hay una gran oferta de gamas y solo están disponibles en algunos países, así que te pueden resultar un poco más difíciles de encontrar.

 

¿Cómo elegir la mejor pulidora?

Debes tener en cuenta factores muy diferentes, como los intervalos de velocidad, el peso de la herramienta, dónde va ubicado su interruptor o los paneles de mando. Además, conviene que eches un ojo a su ergonomía y a sus especificaciones para escoger la que más se adapte a tus necesidades. Te contamos qué aspectos debes tener en cuenta antes de elegir la tuya y te hablamos de cada uno de ellos:

  • Velocidad: Es mejor que la velocidad sea variable y que vaya en un intervalo de al menos 1100 – 2000 rpm. Esto hace que se aproveche mejor la flexibilidad de la pulidora rotatoria, y cuanto mayor sea el intervalo mejores prestaciones tendrá. Las velocidades más bajas sirven para un acabado y refinado perfecto y las más altas sirven para pulir superficies más agresivas.
  • Que tenga control de velocidad electrónico: Esto asegura que la almohadilla gire a una velocidad constante, sin importar la fuerza aplicada, y evita que se atasque a velocidades lentas.
  • Que sea cómoda y fácil de agarrar para trabajar con soltura: Puedes encontrar muchos modelos distintos, con diferente peso y con los controles ubicados en varias partes de la herramienta, por eso te aconsejamos que las pruebes para decidir comprar aquella con la que te sientas más a gusto.

 

Aspectos a tener en cuenta a la hora de elegir tu pulidora

Si estás pensando en adquirir una pulidora rotatoria, debes saber que necesitas tener un buen grado de experiencia. En las manos adecuadas dan muy buenos resultados, pero si la utiliza alguien inexperto, puede dañar la pintura. Por eso, te recomendamos este modelo solo si tienes la suficiente práctica y eres un trabajador paciente.

En el caso de las pulidoras de doble acción, la almohadilla hace un giro circular y elíptico, y genera menos calor sobre la capa de pintura, lo que se traduce en una menor agresividad a la hora de trabajar, por eso es perfecta para el trabajador inexperto. Este tipo de pulidoras solo usan almohadillas de espuma, incluso dos superpuestas, y son más pequeñas. Son pulidoras perfectas para aficionados, y se suelen tener en el garaje para trabajos pequeños. Su desventaja es que existen muy pocos proveedores, y normalmente necesitan un adaptador de voltajes para diferentes partes del mundo, así que necesitarás un transformador de este tipo.

 

Riesgos a tener en cuenta a la hora de usar una pulidora

  • Posibles caídas de objetos por manipulación.
  • Que te golpees con elementos móviles de la máquina.
  • Que se proyecten fragmentos o partículas.
  • Realizar un sobreesfuerzo.
  • Un contacto térmico o eléctrico.
  • Posibles daños a la salud por la exposición a agentes químicos o físicos, como ruidos o vibraciones.

¿Te ha parecido útil esta información sobre las pulidoras? Ahora ya saber qué tener en cuenta a la hora de elegir la tuya.