metodologia lean

Si hablamos de productividad y eficiencia, tenemos que hablar de metodología Lean. Esta práctica para hacer más eficiente algunos procesos en la industria, fue ideada por el director y consultor de Toyota. Lean es sinónimo de eliminar procesos que no aporten valor al producto final y también de minimizar los desperdicios que se generan. Veamos su historia y principios básicos.

 

Historia de la metodología Lean

Aunque ahora nos pueda parecer impensable, antes de la Segunda Guerra Mundial la productividad de Japón era muy inferior a la de Estados Unidos. El ingeniero industrial Taiichi Ohno, director de Toyota viajó a Estados Unidos a finales de los años 30 y quedó asombrado por la eficiencia de los supermercados en el proceso de eliminar residuos y generar valor para el cliente, a pequeña escala. No obstante, las empresas estadounidense estaban centradas en producir grandes cantidades de producto más que en diversificar la producción. Uniendo ambos conceptos, Ohno quiso aplicar la idea de los supermercados en la fabricación en masa: gestión de un empresa de manufactura con la filosofía de eliminar procesos, bajar costes y hacer partícipes a los trabajadores en todo el proceso. Así nació la metología Lean, un sistema que ha hecho que, en la actualidad, Toyota sea una de las empresas mejor valoradas, más rentables y mejor organizadas del mundo.

 

¿En qué se basa la metodología Lean?

La metodología Lean tiene que garantizar que usando los mínimos recursos, la producción se ajuste para que el cliente reciba el máximo de valor. Es clave la reducción de desperdicios y este es el pilar fundamental en que se basa este tipo de gestión. Los costes hay que calcularlos cuando se inicia el desarrollo del diseño del producto, desde el principio.

Para encontrar el equilibrio entre materiales o procesos eficientes y baratos en contraposición a otros seguros y ya usados en el pasado, hay que hacer hincapié en la eliminación de los residuos en:

  • Inventario
  • Sobreproducción
  • Transporte
  • Procesos superfluos que no aportan
  • Espera calculada en tiempo

 

Principios básicos de la metodología Lean

La metodología Lean se vertebra alrededor de unos principios descritos por Ohno, el creador de esta práctica:

  • Desperdicios mínimos (MUDA). Hay que eliminar las cosas que no aportan valor entendiendo valor como algo por lo que el cliente está dispuesto a pagar.
  • Mejora continua. Hay que revisar continuamente cada punto y eslabón de la cadena para alcanzar la perfección en global. Lo ideal es
  • Flujo continuo en todos los pasos del proceso. Identificar el mapa de la cadena de valor (VSM). De esta manera, los procesos que no lo aportan quedan al descubierto.
  • Procesos basados en el PULL. Generando menos desperdicios, aplicando menos esfuerzo, creando una solución ajustada y precisa.

Para conseguir y trabajar en esas mejoras continuas y depurar todas las partes del proceso, se usan unas herramientas concretas de la metodología Lean. Algunas de ellas son:

  • Indicadores. Medir y tener registro de las actividades.
  • Kanban o sistema de tarjetas. Para controlar la ejecución de las tareas. Tiene que ver también con el registro.

Echa un vistazo a nuestro artículo sobre cómo mejorar un proceso en tu empresa que afecta a la productividad de la cadena logística como puede ser el empaquetado y el picking.

La eficacia, la eficiencia y la revisión de procesos sea cual sea la actividad de la empresa es muy necesaria. ¿Cuál es tu experiencia? ¿Tienes alguna vivencia al respecto? Déjanos tus comentarios, ¡nuestra comunidad quiere saber qué piensas!