banco de trabajo

¿Has visto alguna vez un taller, una fábrica o un almacén sin banco de trabajo? Los bancos de trabajo son una parte imprescindible del mobiliario del día a día. Y es, precisamente, por su extendido uso que las tipologías se multiplican según la funcionalidad a la que se vaya a dedicar. En este artículo veremos la definición de banco de trabajo, así como los principales tipos que puedes encontrar en el mercado.

 

¿Qué es un banco de trabajo?

Un banco de trabajo es una mesa especialmente adaptada o acondicionada a una tarea específica. El banco suele ser robusto y puede tener tanto una práctica sencillez en su diseño como complejas especificaciones técnicas que le otorguen el nivel de herramienta.

Elementos de la mesa de trabajo

  • Forma: normalmente son mesas rectangulares. En los cantos o extremos, suelen tener mediciones o reglas para controlar las dimensiones cuando se trabaja.
  • Altura: el banco de trabajo suele tener cierta altura, la justa para que el operario pueda trabajar en ella tanto sentado como de pie.
  • Fijación: es importante que el operario pueda fijar correctamente las piezas con las que trabaja.
  • Almacenamiento: este tipo de mesas suelen tener ciertos cajones o zonas específicas donde almacenar herramientas, piezas u otros artículos de utilidad.

 

Tipos de banco de trabajo

Los tipos de banco de trabajo se dividen, principalmente, según el uso que se le vaya a dar a la mesa. Veamos las principales mesas y sus características más esenciales.

  • Carpintería: para carpintería o ebanistería, estos bancos de trabajo son de madera maciza. Es elemental que disponga de cierto espacio para las herramientas, así como zonas donde poder ensamblar y sujetar las piezas. Pueden soportar pesos considerables.
  • Bricolaje: estas mesas suelen ser sencillas y de madera de unos 25mm de grosor. Suelen ser bastante económicas y se recomiendan para tareas básicas que no requieran grandes exigencias al banco de trabajo.
  • Jardinería: su principal característica es la resistencia al agua y a la humedad. Suelen tener estanterías o ciertos sistemas de almacenaje para herramientas u otros útiles.
  • Electrónica: desde trabajos informáticos, reparaciones electrónicas, montaje… Es de vital importancia que la mesa tenga tomas de corriente a disposición del usuario, así como una iluminación adecuada. Puedes encontrar incluso algunas con lupas incorporadas.
  • En laboratorio: la superficie debe poder soportar ciertas sustancias químicas. Muchas de ellas tienen, además, fuentes de agua y/o combustible, según necesidades.
  • Joyería y relojería: una de las principales características de este tipo de banco es la altura; es importante que el operario tenga el trabajo a la altura de los ojos. Por ello, estos bancos suelen tener una pequeña superficie para trabajar de manera más cómoda.
  • Plegable, portátil o multiusos: estos bancos de trabajo suelen encontrarse en talleres donde se les da poco uso, o un uso ocasional. Incluso en los hogares de los amantes del bricolaje, garajes privados, etc. Destacar la comodidad de poder plegarlo cuando no se usa.
  • Metálico: perfecto para trabajos pesados, este banco es de acero y tiene una robustez excepcional.

 

Ahora que conoces exactamente el significado de banco de trabajo y sus principales tipologías, cuéntanos: ¿cuál es el uso que le das al tuyo? ¡Comenta en nuestro blog!