Los 7 + 1 desperdicios

A veces no somos conscientes de la cantidad de desperdicios que genera nuestra empresa y las pérdidas que ello implica… Hay que entender el concepto de desperdicio como aquello que no añade nada de valor a un producto o servicio. En este sentido es clave detectar los desperdicios que afectan a la calidad final del producto y deshacernos de ellos. ¿Cuáles son los 7 + 1 desperdicios? En el post de hoy veremos cuáles son y cómo pueden ayudarnos a mejorar la calidad de nuestro servicio.

 

¿Qué es un desperdicio?

La idea alrededor del concepto de desperdicio es incrementar las ganancias y resultados a base de revisar cuáles son, es decir, qué desperdicios aún tienes en tu cadena de producción. La metodología Lean de la que te hablamos aquí tiene mucho que ver con este concepto. Así que te recomendamos echarle un ojo al artículo para completar este punto de vista. Siguiendo con la idea de desperdicio, debemos mencionar que cualquier actividad empresarial o industrial se clasifica en una de estas categorías:

  • Actividades con valor agregado. Cliente dispuesto a pagar por el servicio o el producto, el cual ha sido sometido a algún tipo de proceso que ha supuesto un cambio en él físico.
  • Actividades sin valor agregado. No añade valor pero se ejecuta con el objetivo de satisfacer al cliente en las condiciones actuales.
  • Desperdicios. No añade valor y el cliente no tiene ninguna motivación para pagarlo. Puede ser un precio alto o injusto, por ejemplo. Ocupa dentro de los procesos espacio y tiempo inútil.

Así, es de vital importancia identificar esos desperdicios y eliminarlos de cualquier proceso. Es preferible ocupar tu actividad en las actividades de valor agregado. Si vemos en el cuadro de mandos que estamos dedicando más tiempo en actividades sin valor o desperdicios, hay que eliminarlos.

 

Los 7 + 1 desperdicios

Procedamos a analizar cuáles son los 7+1 desperdicios:

  1. – Productos defectuosos. No alcanza los estándares de calidad previstos, lo que provoca pérdidas, errores y pérdida de rendimiento en general.
  2. – Desperdicio de inventario. Material que no es necesario para satisfacer lo que pide el cliente. Puede ser un producto acabado, piezas de repuesto, o también un exceso de materiales al inicio.
  3. – Despilfarro. No prever de manera correcta las necesidades del cliente o verificar algo varias veces en diferentes momentos del proceso. Ambos ejemplos generan innecesarios.
  4. – Espera. Aunque es un desperdicio difícil de calibrar, podríamos poner como ejemplo la espera de datos, espera de suministros, no tener trabajo o tareas…
  5. – Movimiento. Cada tarea tiene un tiempo de ejecución estipulado, lo que esté fuera de esto, es un desperdicio: caminar, aproximar, buscar, escoger, organizar… esto son desperdicios de movimiento.
  6. – Transporte. No hay que confundirlo con el anterior. Transportar es mover el producto de un lado a otro, pero sin añadir ningún valor al producto.
  7. – Sobreproducción. Este es un punto clave, puede que el que más. Puede multiplicar exponencialmente el resto de desperdicios, ya que hablamos de producir piezas de más, sin proyectar la cantidad de producción según la demanda del cliente.
  8. – Factor humano. Es el desperdicio de habilidades y ocurre cuando no estás aprovechando toda la capacidad de tus empleados. Hay que ajustar a las personas en el puesto de trabajo en el que sean más hábiles. Este punto tiene que ver con detectar el talento de tus trabajadores.

 

Nos gustaría saber si en tu día a día tienes manera de aplicar esta herramienta de gestión eficaz. ¡Inténtalo y verás cómo mejora tu producción y rendimiento! ¡Explícanos tu experiencia más abajo!